Los seres humanos interactuamos constantemente con diversidad de equipos, familia, pareja, amigos, trabajo etc. Presentándose en ocasiones, conflictos que pueden ser severos y desgastantes cuando se trata de vampiros emocionales o relaciones toxicas, por lo que el auto conocimiento y la adquisición de herramientas prácticas para saber detectarlos y manejarlos adquiere una particular importancia en el liderazgo moderno.